California Dreamin’: Golden Gatto Gate

Algo quedaba por hacer en San Francisco y más allá allende la bahía. En los límites de la ciudad sobre la bahía y frente a la mítica isla de Alcatraz, se alza la famosa puerta dorada, o como allí lo llaman, el puente Golden Gate, que no debe dejarse de cruzar a pie hasta el otro lado de la bahía, llegando hasta Sausalito, un pueblo en la costa desde donde puede verse la panorámica del puente y el skyline de San Francisco.

Con esta última entrada acaba el último gran viaje de Gatto publicado en su blog, si bien es verdad que ya hace prácticamente 7 años que estuve allí... habrá que volver. De momento, os avanzo que mi pròxima colección tratara esta vez si, de un viaje acabado de disfrutar esta pasada Semana Santa, a un lugar en el que aquí mismo quizás encontréis alguna referencia... ¡que casualidad!


El Golden Gate Park y el puente

Rodeando la entrada al puente, se encuentra uno de los mayores parques de la ciudad, el Golden Gate Park, lleno de figuras de flores de diversos colores y edificios singulares como el Palacio de Bellas Artes, en donde Sean Connery se encontraba con su largo tiempo perdida hija en "La Roca".

La puerta dorada

Tras un pequeño paseo alrededor del parque, nos dirigimos hacia la entrada al puente, el cual puede ser cruzado a pie por sus aceras laterales, mientras el tráfico rodado ocupa los carriles centrales. Se trata de un puente colgando construido en los años 30, que con una longitud aproximada de 2.000 metros, cuelga a 227 metros sobre las aguas de la bahía, en el estrecho que une las dos penínsulas llamado de la misma forma: la puerta dorada, en referencia al estrecho de Constantinopla, que une Europa con Asia.

Sección del cable

Su característico color rojo, fue en realidad producto de una medida de urgencia cuando fue apresuradamente pintado para evitar la corrosión producida por las aguas del océano Pacífico, siendo una de las más grandes y reseñables obras de ingeniería de su época.

Alcatraz, la roca

Aparte de las vistas desde el puente, desde el que se puede ver la famosa isla de Alcatraz directamente enfrente de este, es particularmente espectacular la visión de los gruesos cables de acero de un diámetro de más de un metro, y la altura de sus torres principales, de unos 150 metros si tenemos en cuenta que la altura del propio puente a las aguas es de 77 metros para permitir el paso de barcos por debajo, y que la altura máxima del puente es de 230 metros.

Las grandes torres

Ya desde el otro lado, se obtienen unas espléndidas vistas del puente en todo su esplendor, la bahía y el skyline de San Francisco. Andando un poco más o cogiendo un autobús, se llega hasta el primer pueblo del condado de Marin, Sausalito, en donde se puede tomar una comida a base de marisco para recuperar fuerzas, como así hicimos.


La vuelta a casa

Y con esto y unas últimas compras en el Macy's de Union Square es como acabo nuestro viaje, antes de dirigirnos al aeropuerto internacional de San Francisco en donde volveríamos mediante un agotador vuelo con una larga escala en Amsterdam.

Pronto volveré si no a la Costa Oeste, a Estados Unidos, y quien dice pronto dice en dos semanas, por lo que espero contaros por aquí mis peripecias justamente en la otra costa, dos semanas por mi cuenta que me llevarán de Boston a Washington... ¡próximamente en el blog de Gatto!

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