Orandour sur Glane
La ruta del tercer día nos llevó a cruzar gran parte del centro de Francia en dos etapas, la primera, de unos 170 km hasta nuestra primera parada en las cercanías de Limoges, en Orandour sur Glane, en donde comeríamos tras la visita al pueblo antiguo, para continuar luego hasta la zona de los castillos del Loira y dormir en Chinon tras aprovechar ya la tarde para visitar algunos de los castillos.
Orandour sur Glane se convirtió en un símbolo de la brutalidad nazi tras la Segunda Guerra Mundial. En represalia por los desembarcos de Normandia, el 10 de Junio de 1944 una compañía de las Waffen SS atacó el pueblo indefenso asesinando y quemando en la iglesia a la mayoría de sus habitantes, dejando además el pueblo en ruinas como consecuencia del saqueo.
Hoy en día, se pueden visitar las ruinas del pueblo antiguo como memorial de la masacre, y visitar la exposición del museo en donde se explican en detalle los hechos de aquel día y el contexto general de la guerra, ocupación, etc...
Todo el lugar es como pasear por un cementerio, y de hecho a un extremo del pueblo se levanta el memorial conmemorativo y se encuentra lo que era el cementerio, pero todo el fantasmal entorno en el que parece que el tiempo se paró en 1944 y que desde entonces así permanece, invita al silencio y el respeto.
Tras la visita tomamos algo de comer en el pueblo nuevo y nos dispusimos a continuar nuestro viaje hacia la región de los castillos del Loira para dormir en Chinon esa noche. No obstante, todavía dió tiempo de realizar la primera visita a uno de los castillos del Loira, Azay le Rideau, cerca de Tours, y acercarnos a alguno otro... una vez en la zona las distancias son cortas y las carreteras tranquilas recorren parajes rurales en los que por sorpresa aparecen impresionantes castillos, algunos grandes, otros más pequeños, pero todos con su encanto.
Entrando en el Loira
Si bien fue al día siguiente (en el próximo episodio de las aventuras de Gatto por Francia en octubre de 2013...) cuando visitamos los castillos más famosos y representativos, el de Azay tiene un encanto especial al ser un pequeño castillo romboidal erigido en el centro de un pequeño estanque. El esquema de visita de todos estos castillos es bastante similar... una visita por fuera alrededor para admirar la obra arquitectónica en si y disfrutar de los jardines de aquellos que los tienen, y una visita interior de las estancias normalmente con su mobiliario de época o de su último uso.
Y para finalizar, por si no hubiera sido el día aún lo bastante intenso, reparamos en que aún quedaba luz y tiempo para una última visita a otro castillo sobre la marcha sin que estuviera planeado. Siendo finales de octubre era bastante sorprendente como aún los días resultaban bastante largos, y es que estando la región de los castillos ya hacia la parte centro oeste de Francia, se nota como pese a tener el mismo horario que en la parte mediterránea la luz se alarga hasta horas más tardías.
Consultando el mapa y los posibles lugares de interés, vimos que merecía la pena llegar aunque fuera para una visita exterior hasta el castillo de Langeais, de un aspecto mucho más medieval, pues fue edificado en su origen a finales del siglo X, aunque reconstruido y extendido en siglos posteriores por sus diversos ocupantes. Nos quedamos con ganas de ver su interior y jardines, aunque sin duda ya la vista de su imponente fachada merece la pena.
Langeais, el pueblo que en realidad da nombre al castillo, está además en la propia orilla del Loira, por lo que se puede contemplar el río en toda su amplitud, siendo particularmente agradable visto con los colores del atardecer.
Y ahora si, agotados hacia Chinon, no demasiado lejos al menos, y sin mucho que añadir al respecto. Pese a ser Chinon seguramente uno de los lugares de referencia en el Loira por su gran ciudadela medieval, lo cierto es que lo usamos de base para dormir y movernos el día siguiente alrededor hacia otros castillos de los que hablaré en el próximo post... ¡pero siempre hay que dejar una razón para volver a los sitios y la visita de Chinon sin duda puede ser una excusa para volver a la zona en el futuro!
Datos de interés
Distancia: 170 km hasta Orandour y 200 km de allí a Chinon.
Alojamiento: Ibis Styles Chinon (***)
Lugares destacables: En la zona hay pequeños castillos de campo (Villandry, Ussé...)
La ruta del tercer día nos llevó a cruzar gran parte del centro de Francia en dos etapas, la primera, de unos 170 km hasta nuestra primera parada en las cercanías de Limoges, en Orandour sur Glane, en donde comeríamos tras la visita al pueblo antiguo, para continuar luego hasta la zona de los castillos del Loira y dormir en Chinon tras aprovechar ya la tarde para visitar algunos de los castillos.
Orandour sur Glane se convirtió en un símbolo de la brutalidad nazi tras la Segunda Guerra Mundial. En represalia por los desembarcos de Normandia, el 10 de Junio de 1944 una compañía de las Waffen SS atacó el pueblo indefenso asesinando y quemando en la iglesia a la mayoría de sus habitantes, dejando además el pueblo en ruinas como consecuencia del saqueo.
Hoy en día, se pueden visitar las ruinas del pueblo antiguo como memorial de la masacre, y visitar la exposición del museo en donde se explican en detalle los hechos de aquel día y el contexto general de la guerra, ocupación, etc...
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| Coche calcinado entre los restos de Orandour sur Glane |
Todo el lugar es como pasear por un cementerio, y de hecho a un extremo del pueblo se levanta el memorial conmemorativo y se encuentra lo que era el cementerio, pero todo el fantasmal entorno en el que parece que el tiempo se paró en 1944 y que desde entonces así permanece, invita al silencio y el respeto.
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| Lo que queda de Orandour |
Tras la visita tomamos algo de comer en el pueblo nuevo y nos dispusimos a continuar nuestro viaje hacia la región de los castillos del Loira para dormir en Chinon esa noche. No obstante, todavía dió tiempo de realizar la primera visita a uno de los castillos del Loira, Azay le Rideau, cerca de Tours, y acercarnos a alguno otro... una vez en la zona las distancias son cortas y las carreteras tranquilas recorren parajes rurales en los que por sorpresa aparecen impresionantes castillos, algunos grandes, otros más pequeños, pero todos con su encanto.
Entrando en el Loira
Si bien fue al día siguiente (en el próximo episodio de las aventuras de Gatto por Francia en octubre de 2013...) cuando visitamos los castillos más famosos y representativos, el de Azay tiene un encanto especial al ser un pequeño castillo romboidal erigido en el centro de un pequeño estanque. El esquema de visita de todos estos castillos es bastante similar... una visita por fuera alrededor para admirar la obra arquitectónica en si y disfrutar de los jardines de aquellos que los tienen, y una visita interior de las estancias normalmente con su mobiliario de época o de su último uso.
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| Azay-le-Rideau, un pequeño castillo sobre un estanque |
Y para finalizar, por si no hubiera sido el día aún lo bastante intenso, reparamos en que aún quedaba luz y tiempo para una última visita a otro castillo sobre la marcha sin que estuviera planeado. Siendo finales de octubre era bastante sorprendente como aún los días resultaban bastante largos, y es que estando la región de los castillos ya hacia la parte centro oeste de Francia, se nota como pese a tener el mismo horario que en la parte mediterránea la luz se alarga hasta horas más tardías.
Consultando el mapa y los posibles lugares de interés, vimos que merecía la pena llegar aunque fuera para una visita exterior hasta el castillo de Langeais, de un aspecto mucho más medieval, pues fue edificado en su origen a finales del siglo X, aunque reconstruido y extendido en siglos posteriores por sus diversos ocupantes. Nos quedamos con ganas de ver su interior y jardines, aunque sin duda ya la vista de su imponente fachada merece la pena.
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| La impresionante entrada del chateau de Langeais |
Langeais, el pueblo que en realidad da nombre al castillo, está además en la propia orilla del Loira, por lo que se puede contemplar el río en toda su amplitud, siendo particularmente agradable visto con los colores del atardecer.
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| Atardecer sobre el Loira en Langeais |
Y ahora si, agotados hacia Chinon, no demasiado lejos al menos, y sin mucho que añadir al respecto. Pese a ser Chinon seguramente uno de los lugares de referencia en el Loira por su gran ciudadela medieval, lo cierto es que lo usamos de base para dormir y movernos el día siguiente alrededor hacia otros castillos de los que hablaré en el próximo post... ¡pero siempre hay que dejar una razón para volver a los sitios y la visita de Chinon sin duda puede ser una excusa para volver a la zona en el futuro!
Datos de interés
Distancia: 170 km hasta Orandour y 200 km de allí a Chinon.
Alojamiento: Ibis Styles Chinon (***)
Lugares destacables: En la zona hay pequeños castillos de campo (Villandry, Ussé...)
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